Hace como un mes que encontré en el mercado unas galletas María de chocolate y las compré para hacer esta natilla de chocolate y naranja. Quería usar unos pedacitos de naranja confitada que sobró de la Navidad y servirlas en estos vasitos de cristal en los que venían unos yogures que tomé con unas amigas en Nueva York.
Las hice guardarlos y además me los traje en la maleta (después de lavarlos) pensando que me los quitarían al pasar por seguridad en el aeropuerto, pero me dieron una probadita del TSA preapproved ese día y los vasitos llegaron a casa sanos y salvos.
Locuras de bloguera. ¡Cómo si no hubiera suficientes props ya en casa! En fin, que quería poner capas de galletas enteras en medio, pero a la hora de montar el postre, las galletas no cabían por la boca de los pomitos.
Ni corta ni perezosa, pasé unas cuantas por el procesador de alimentos y le di la vuelta al desconsuelo mientras la natilla se refrescaba. Si no tienes procesador, no te me desconsueles tú tampoco, puedes triturarlas con una botella, como en los viejos tiempos. Esos tiempos a los que nos traslada el olor a leche caliente dulce con que la natilla perfuma la casa mientras la hacemos.
Serví 3 raciones porque eran 3 pomitos y dio exacto, pero la verdad que hubiéramos podido comer 4 de ellas perfectamente.
Están listas en 15-20 minutos. Luego refréscalas durante media hora.
Ingredientes
2 tazas de leche
1 dedito de cáscara de naranja
3 cdas de maicena
1 pizca de sal
2 cdas de azúcar
3 cdas de Grand Marnier o Cointreau (ambos son licores de naranja)
1 cdta de extracto de vainilla
1/3 de taza de chocolate semiamargo bien picadito
10 galleticas María de chocolate
1 cda de pedacitos de naranja confitada (opcional)
Preparación
Pon a calentar la leche a fuego medio con la cáscara de naranja. Asegurándote que la corteza no tiene restos del interior blanco.
Coloca en una taza la maicena, la sal y el azúcar. Cuando la leche esté caliente, bate un par de cucharadas con esos tres ingredientes y forma una especie de pasta con ellos.
Añade a la leche la vainilla y el Grand Marnier. Adiciona luego la pasta que has hecho en la taza y disuélvela, batiendo todo el tiempo, para que no se formen grumos. Cocina unos 5 minutos, hasta que espese.
Apaga el fogón y agrega el chocolate. Sigue batiendo para disolverlo. La natilla irá cambiando de color y se convertirá en natilla de chocolate.
Pásala a un cuenco y tápala con papel film para que se refresque sin que se endurezca la superficie.
Tritura las galletas y pon en el fondo de los vasitos un par de cucharadas de galletas molidas.
Una vez fresca la natilla, llena casi hasta la mitad de los vasito con natilla, ponle un par de cucharadas más de galletas molidas a cada uno, llena hasta arriba con el resto de la natilla, espolvorea con el poquito que queda de galletas molidas y adorna con la naranja confitada.
Pueden servirse a temperatura ambiente o enfriar un par de horas.
Si te gusta la natilla, no te pierdas esta de vainilla, que es una de las recetas más populares del blog y del mi libro.
- Sorbet de tamarindo - septiembre 3, 2024
- Ensaladilla rusa, proporciones - agosto 12, 2024
- Corvina a la italiana - junio 18, 2024
Qué ricas natillas Vero, me encanta esta combinación de chocolate y naranja, además el toque del licor le da un punto extra de sabor.
Besos.
Es una de mis combinaciones favoritas también. Besitos.
I like the fact that it’s a recipe from scratch. I love it! Thanks know you for sharing.
Thanks for stopping by.